Economía Real vs Mercados Financieros; Argentina, mercado emergente y burbujas financieras. Tres preguntas a José Pablo Dapena.

En el actual escenario local de sucesivas postergaciones, extensión de la cuarentena, demora en la definición de la reestructuración de deuda soberana, sumado a la situación de ahogo del sector productivo y comercial, y la emisión desmedida de los bancos centrales, entrevistamos al Dr. en Economía José Pablo Dapena. 

José Pablo Dapena es Director del Departamento de Finanzas, de la Especialización, Maestría y Doctorado en Finanzas de UCEMA.

 

¿Podría analizar la relación entre los mercados financieros y la economía real en este período de extensión de la cuarentena y en un futuro de pos-pandemia en nuestro país?

Una cuestión que ha condicionado bastante el aspecto económico atravesando la pandemia ha sido el proceso de re-negociación de deuda, que comenzó con los bonos bajo legislación estadounidense. Esa incertidumbre, sumada a las restricciones a la movilidad que afectaron la actividad económica, han generado una situación de temor, que bajo ningún aspecto es positiva para la economía. Eso se ha visto reflejado tanto la cotización del USD bolsa y cable, como el precio de las acciones. Por otra parte, la fuerte emisión y el déficit fiscal crean una potencial presión inflacionaria que genera un desafío poder controlar a medida que se vayan relajando las restricciones.

Teniendo en cuenta la declaración del MSCI de mantener a la Argentina en la categoría de mercado emergente, las tasas bajas globales planteadas hasta 2022, y la potencial recuperación económica global ¿Cuál considera que será el efecto de estos acontecimientos para la Argentina?

Es una buena noticia, es decir la situación seria peor sin ello, pero Argentina depende mas de si misma que del ambiente externo, gran parte de la recuperación argentina depende de la capacidad de su clase dirigente de generar los incentivos a la inversión para que la economía pueda crecer de manera sustentable en el mediano y largo plazo. La falta de previsibilidad, la presión impositiva y la inflación son factores que atentan en ese sentido.

En el contexto internacional, los tres índices de Wall Street cerraron la semana pasada con sus mejores resultados trimestrales en más de 20 años; entre abril y junio el Dow Jones obtuvo un aumento cerca de un 18%, algo nunca visto desde 1987, el Nasdaq escaló un 31%, su mayor alza desde 1999 y el S&P500 ascendió cerca de 20%, su ganancia más importante desde 1998. ¿Qué opina de estas recientes subidas en el mercado de valores de EEUU, a pesar de la incierta perspectiva económica, los riesgos de una segunda ola de Coronavirus y las incertidumbres en torno a las próximas elecciones estadounidenses? ¿Se podría hablar de una burbuja financiera, fundamentalmente en los rubros tecnológico?

Si bien alcanzaron cifras récord, también venían de caídas récord, por lo que podemos hablar más bien de una recuperación veloz, que de alguna manera refleja dos aspectos, por un lado la reacción de la Reserva Federal para proporcionar liquides al mercado a través de inyecciones de dinero, y en segundo lugar la expectativa que el efecto de la pandemia pase rápido. Los estímulos monetarios tienden a crear un efecto de burbuja a través de la inyección de crédito. El desafío es que la economía se recupera en términos reales.

Entrevistadora: Valentina Díaz Estévez. Contadora Pública y Posgraduada en Finanzas UCEMA